Ecos de la sabana (14)

Miércoles 3 Marzo 2010
Comunidad de mujeres.
Hoy he tenido el retiro de cuaresma en un pueblo con una comunidad compuesta casi solo por mujeres. Esta comunidad está formada por 3 pueblos en donde la comunidad cristiana tiene bastantes problemas y parece que no encuentra el camino para sacar la cabeza y marchar hacia adelante. Era curioso ver que no había más que 3 hombres adultos aunque en realidad hay bastantes hombres adultos en la comunidad, pero la mayoría han tomado la opción de la poligamia, es decir de casarse con varias mujeres. Aquí es algo muy normal y frecuente, y muy arraigado en la tradición. De hecho, según la tradición, si uno quiere presentarse como un hombre, debe tener varias mujeres para así mostrar que tiene medios y que no es un pobre. Para casarse la familia del marido debe dar una cantidad de dinero y de bienes a la familia de la mujer, y solo después de esto se concluye el proceso tradicional y se puede celebrar el matrimonio. No es un noviazgo como el que nosotros conocemos pues tiene sus etapas y su proceso.
Os explico un poco los grandes momentos del matrimonio. El primero y más importante es GI SLEKNA o dar el gallo. El grupo que acompaña al joven (padre, tío y amigos) suelen ir por la noche, tarde y sin avisar, a casa de los padres de la chica para probar la capacidad que estos tienen de acogida al improviso. Al día siguiente se pregunta a la chica si quiere casarse con el joven y si dice que sí debe coger el gallo de su mano y dárselo al anciano de su familia. Si ella no lo quiere, basta con no cogerlo. Otro momento muy importante es CUK BEGENA o dar la dote. La dote es el símbolo de la unión entre dos familias. Refuerza la alianza entre las familias y es una de las garantías que la mujer pertenece al marido y a su familia. La dote es el signo que el hombre es digno de su mujer, es la prueba que sabe organizarse y que considera a su futura mujer. Para la familia de la chica la dote es como un pago. Los mayores recuerdan que antes la dote no era con dinero ni con vacas como hoy, sino con 1 caballo de carrera y trozos de mineral de hierro, signo de riqueza que servían para fabricar armas (lanzas, flechas...) e instrumentos de trabajo (azada...). Los caballos tenían una gran importancia y eran signo de prestigio. Hoy la bicicleta ha sustituido al caballo.
La cantidad no es fija y varía según el poder económico de la familia del novio y también según la estatura y belleza de la chica; a las altas se les daba más dote que a las bajas.
Se puede decir que la dote no se acaba de pagar nunca, dura toda la vida hasta la muerte de la mujer e incluso hasta después, si ella ha tenido muchos hijos, sobre todo hijas.
El otro momento importante es el VOGODONA o marcha-camino nupcial. Cuando las 2 familias ya están de acuerdo fijan una fecha para acompañar a la nueva esposa a la casa de su marido. Se suele hacer por la tarde para llegar de noche a la nueva casa. Antes de marcharse la joven es bendecida por el padre con unas palabras y desmenuzando sobre la cabeza de la hija unas hierbas arrancadas del techo de la casa de la madre, es el lugar dónde la joven nació. Luego hay todo un cortejo nupcial compuesto por jóvenes de su familia y de su pueblo que la acompañan por el camino con cantos, llevan el ajuar, las perolas, utensilios, ropa y regalos recibidos. Es un momento de fiesta. La familia del joven debe acogerlos muy bien y darles bien de comer todo el tiempo que estén allí, 1 o 2 días.
Disculpadme que os haya soltado este pequeño rollo de cultura musey sobre el matrimonio pero lo he hecho rápidamente pues todo el proceso son unas 12 o 13 etapas, pero no hay que cansaros. Todo esto porque venía a cuento y para haceros ver la importancia del matrimonio, que aquí no es la unión de un hombre sólo con una mujer, sino que concierne a todo el pueblo. Es la unión de 2 familias y todavía más es la unión de vivos y muertos o antepasados. Otra cosa curiosa es que todo lo que es dado en la dote y en el proceso del matrimonio es contabilizado y si un día el matrimonio se disuelve todo esto es exigido a la familia de la novia y todo debe ser devuelto.

En la actualidad todo este proceso no se respeta siempre. Hay problemas nuevos que han surgido debido al contacto con otras culturas y a la aparición del dinero más fácil. Muchos jóvenes eligen a sus mujeres solo por su belleza y hay un fenómeno nuevo que se llama “dumba huu sukña”, que quiere decir el matrimonio que se hace en el mercado, lugar de encuentro semanal. Es prácticamente un rapto de la chica en el que no se sigue ninguna etapa.
Os comentaba que una gran tentación también para los cristianos es la de casarse con varias mujeres para ser reconocidos y considerados como grandes. Como veis el evangelio interpela todas las culturas, sociedades y personas, y nos pide siempre optar por Jesús y su mensaje, o seguir lo que la sociedad, la mentalidad ambiente, la mayoría, los medios de comunicación nos ofrecen y meten por los ojos.
Ya veis que no todo es del color de rosas, y cómo, en todos los lugares, ser cristiano nos pide optar con fuerza por Jesús, su causa y su reino.


Jueves 4 Marzo 2010
“Poner en camino”.

De nuevo hoy he estado en otro pueblo con otra comunidad para el retiro de cuaresma. Yo suelo decir que soy un poco como los nómadas, cada día de un sitio para otro. Hoy la sorpresa ha sido de ver que el lugar en donde nos hemos reunidos para el retiro y en donde la comunidad se reúne para la catequesis y la oración de los domingos en donde no hay misa, era un gran árbol sin duda casi centenario. Era el karité pero a pesar de ser grande y viejo casi no tenía hojas y por consiguiente casi sin sombra. Para mí habían improvisado un cobertizo y me he resguardado bien pero ellos han soportado estoicamente el sol que caía con gran fuerza. Es sin duda por eso que son negros como el azabache pues no solo hace calor y mucho sol, sino que se pueden pegar horas bajo un sol de justicia casi sin rechistar.
Al final del retiro me habían propuesto un camino que nunca había hecho y como era complicadillo, uno de ellos se ha ofrecido para “ponerme en camino”. Es la traducción literal del hecho de acompañar al huésped cuando regresa a su casa; y a veces este “poner en camino” significa andar varios kilómetros. Hoy de hecho iba en moto y el que “me ha puesto en camino” me ha acompañado durante 5 km hasta el río en donde hemos subido la moto sobre la piragua para atravesarlo, y desde ahí ha regresado a su casa, pero esta vez andando.
Sin duda que son gestos hermosos de acogida y atención, y nos hacen estar atentos y acogedores hacia aquellos que también vienen a visitarnos. En este tiempo de cuaresma puede ser un ejercicio bonito este de “poner en camino” a los que nos visitan, sorprenderá a más de uno y nos ayudará a hacer un poco más de ejercicio.


Viernes 5 Marzo 2010
Conflicto entre una mujer y la esposa de su marido.

Esta tarde después del retiro he ido a un pueblo a unos 8 km a visitar a Noel, un catequista que me había invitado a ir a verlo y ver su casa. Para mí es una ocasión preciosa de conocer su familia, sus vecinos y de ver en donde vive. No había ido nunca y he tomado el camino que me habían explicado, pero tenía tanta arena que más que ir en moto parecía que hacía surf o esquí. Menos mal que he llegado bien, y ellos me han dicho que había cogido el camino que no debía coger, ya que hay un senderillo para las bicis y motos, que he tomado de regreso a casa.
Al llegar a su casa Noel estaba metido en el pozo del agua, justo detrás de su casa, escarbando pues este se había secado. Él vive en una zona que se inunda por completo en la estación de lluvias, pero ahora conforme la estación seca avanza la capa freática baja de nivel y si el pozo no es muy profundo se seca y hay que limpiarlo escavando más para que vuelva a tener agua. Allí lo he encontrado trabajando con la ayuda de su hijo y de su esposa. Después de lavarse y retomar el aliento tras ese trabajo duro, hemos estado charlando un buen rato sobre su familia, su vida y la comunidad cristiana de su pueblo. Mientras tanto su mujer se afanaba preparando la sabrosa salsa de cerdo con hierbas de aquí, yendo al pozo varias veces para buscar agua para cocinar el arroz, para lavar las vasijas y para lavarnos las manos y beber. Poco a poco ha ido viniendo gente a saludarnos pues me habían visto pasar con la moto y preguntar en dónde vivía Noel, y sabéis que por estos rincones la privacidad y la intimidad prácticamente no existe.
De repente ha llegado una mujer, al verme se ha quedado a un lado en silencio durante un buen rato. Cuando le han preguntado qué quería, se ha puesto a hablar sin parar. Se le veía muy enfadada y el motivo era que había discutido fuerte con la primera mujer de su marido, aquí llamada coesposa. Después de escuchar su monólogo Noel le ha invitado a sentarse en su casa y a tranquilizarse. Y de hecho al rato han venido algunos de sus hijos para hablar con ella.
A muchos de vosotros os sorprenderá esto de la “mujer de su marido”, pero es una realidad muy frecuente aquí, esta de la poligamia. Ya os comentaba poco más arriba. Es una tentación muy grande para los hombres, pues es vista como signo de grandeza, de riqueza… aunque en realidad, la mayoría de las casas de polígamos que encuentro y visito, suelen estar bastante poco cuidadas y desordenadas.
Al rato otra de sus hijas ha venido par a traerle la esterilla un y un saco con todos sus cacharros ya que tenía la intención de marcharse a casa de sus padres. Le hemos dicho que descansara y reflexionara un poco, sin tomar decisiones precipitadas.
Después de cenar, de tomar el té y de charlar un buen rato he tomado el camino de regreso, sin tanta arena pero con un poco de miedo pues era de noche todo muy oscuro y un senderillo desconocido. Gracias a Dios he llegado bien, aunque cansado.


Jueves 11 Marzo 2010
En ciertos lugares, la vida no vale nada.

Entre las parejas que están viviendo en el centro de formación de catequistas del que ya os he hablado, hay 2 que están esperando familia. Una es fuerte, lleva muy bien su embarazo y ya tiene 4 hijos. La otra, en cambio, es frágil y anda siempre con molestias. Es su 2º embarazo pero no tiene todavía hijos, pues el primero no se pasó bien y tuvo un aborto natural a los 6 meses. Bonne Année, como ella se llama, lleva más de 2 semanas con fiebre que ha llegado a 40ºC. Ha estado varias veces en el centro de salud y ha recibido el tratamiento contra la malaria, pero no acaba de recuperar la salud. Se le ve cansada, ya que a la fiebre se junta el gran calor que tenemos desde hace más de 3 semanas y por si fuera poco el embarazo de 6 meses.
Ayer cuando llegué a casa después del último retiro de cuaresma a eso de las 4 de la tarde, con un calor infernal, me dijeron que de nuevo estaba en el dispensario. Fui a verla y tenía 41ºC de fiebre. El enfermero dijo que había que llevarla al hospital a Gunu Gaya pues él había hecho todo lo que estaba a su alcance y no podía hacer nada más, y no veía ninguna mejoría. Su marido quería esperar al día siguiente pues ir al hospital significa tener que pagar bastante dinero para recibir la visita y el tratamiento. Él quería ir a pedir dinero a su familia. Yo le dije que no se podía esperar y vimos que era mejor que la llevara y luego él buscaría el dinero necesario. Y así fue, la llevé en la moto, sin correr demasiado y evitando los baches. Al llegar al hospital se le veía agotada entre el viaje, el calor y la fiebre. La examinaron y me dijeron que para empezar el tratamiento había que pagar, sino ellos esperaban. Yo avancé el dinero y así pudieron empezar inmediatamente. Al rato llegó su marido con la bici y como parecía que la cosa iba bien los dejé, ya bien entrada la noche, para irme a casa a lavarme y descansar un poco.
Hoy, antes de retomar el camino para la reunión que tenía programada, temprano a eso de las 6’30, he pasado a verlos y ver cómo había pasado la noche. Estaba ya en el reparto de maternidad y me decían que de nuevo a media noche tuvo convulsiones y mucha fiebre. Yo me marché con la esperanza que el médico la visitaría al ver su estado.
Esta tarde, al ponerse el sol, un hermano del marido ha pasado a decirnos que a eso del mediodía he dado a luz prematuramente. Quizás en cualquier otro sitio ese niño podría seguir viviendo pero aquí no ha sido posible al no haber ni incubadoras ni nada por el estilo. Nos decía que el médico no la había visitado y claro después de tantos días con fiebres, con convulsiones, era el desenlace esperado. Ella parece que está bien pero sin duda que con la moral por los suelos, al ser el 2º y porque se les veía con ganas de tener un hijo. Lo importante es que ahora ella se recupere y a ver si se puede saber la causa para evitar la próxima vez, pero con los médicos de aquí será todo un milagro el conocer eso.
Hay una canción mejicana que dice “la vida no vale nada” y hoy pensaba que aquí uno descubre la verdad de esta canción y se da uno cuenta cómo por haber nacido en ciertos lugares y para ciertas personas “la vida no vale nada”. Esperemos que Bonne Année se recupere y puedan tener ese niño/a tan deseado y esperado.