jueves, 25 de abril de 2013

Ecos de la Sabana - nº 12 - 76 y fotos visita ciudad.

Domingo 7 Abril 2013
 ¿A donde van todas estas riquezas?
Después de Pascua hemos hecho una salida comunitaria con los jóvenes de aquí de nuestra casa hacia la costa oeste de Camerún. Han sido dos días muy agradables de estar juntos y de descubrir las bellezas de la naturaleza que este país nos tiene reservadas. Para mí ha sido también un momento de darme cuenta de las enormes potencialidades de las que dispone este país. Hemos recorrido kilómetros y kilómetros viendo a un lado de la carretera plantaciones inmensas de hevea, no sé si se llama así en español, pero es el árbol del que se extrae el caucho para hacer neumáticos u otras cosas. Había campos inmensos de arboles ya ancianos pero junto a estos habían plantado ya otros campos inmensos de arboles jóvenes, quiere decir que es algo que produce y que vale la pena.
También ha habido ratos y durante muchos kilómetros de ver a un lado y a otro plantaciones inmensas y modernas, con riego por aspersión, de bananeros. Por lo visto todo lo que se recoge es destinado a la exportación y quizás alguno de los plátanos que os coméis vengan de Camerún.
Y no es todo pues también hemos tenido durante largos ratos y muchos kilómetros otras plantaciones de palmeras de aceite, de las que se recogen unos racimos grandes con unos frutos rojos de los que se extrae el aceite de palma que es muy utilizado en la cocina y con el que se hacen también los biocombustibles.
Por último hemos visto unos pozos de extracción de petróleo y una refinería muy grande que produce parte de lo que aquí se consume en combustible.
Es impresionante el ver esos campos tan cuidados y durante tantos kilómetros y eso pozos de petróleo a unos metros de la playa, pero yo me decía en mis adentros a donde va toda esta riqueza que aquí se produce y quien es el que se aprovecha de ella. Quizás son preguntas impertinentes que no hay que hacerse pero para mí ha sido algo automático. Precisamente estos días leía un libro de Ludovic Lado, un jesuita camerunés, sobre la situación social del país y la resignación de la gente con un título muy sugestivo “De la decadencia a la disidencia: ¿qué cristianismo para el renacer de Camerún?”. El autor insiste en que es solo a través de la toma de conciencia de la situación del país y de las riquezas de todo tipo que aquí hay que el país podrá avanzar y desarrollarse. Muchos solo miran al pasado y a los abusos que la colonización causo, pero hay que descubrir la riqueza que está a nuestro alcance. Camerún es un país rico pero en donde muchos, por no decir la mayoría viven en la pobreza, algunos incluso en la miseria. A menudo se oye la frase “on va faire comment?”, es decir “¿que podemos hacer?”, y eso hace que la mayoría crucen los brazos y no digan nada, intentando sobrevivir como sea.
Está claro que las cosas no pueden cambiar si la gente no cambia y no reacciona. El jesuita invita a la gente a actuar, a no permanecer pasivos, a no dejar que los otros escriban nuestra historia, ni dejar que el país se construya sin ellos. Es cierto que muchas cosas no funcionan como deberían pero por eso mismo hay que tomar conciencia que el futuro depende del compromiso de cada uno, no es un regalo caído del cielo sino que hay que luchar y pelearse, ¡sin violencia claro!
Este termina diciendo que si cada uno hace lo que debe y puede, con confianza y un poco de paciencia, con la ayuda de Dios, todo cambiará.
Esta es mi esperanza después de descubrir las inmensas riquezas y posibilidades con las que este país dispone. Ojala puedan servir no solo para el bienestar y derroche de unos pocos, sino para el bienestar de los que más lo necesitan, los pobres, que son tantos.

Miércoles 10 Abril 2013
Exposiciones al aire libre
Ir a la ciudad de compras o el solo hecho de dar un paseo o de pasar con el coche es toda una distracción y uno puede pensar que está en un supermercado gigante. A cada lado de la calle hay gente que vende todo tipo de cosas, hay exposición de muebles: sofás y cómodos muebles de oficina, muchos venden cosas para comer: buñuelos, fruta, bocadillos de todo tipo, otros te hacen hasta la tortilla con un carrico que llevo una sartén y una bombona de butano que alimenta el hornillo, los hay que hacen palomitas de maíz con otro carrico y un artilugio muy peculiar que un día tengo que fotografiar, otros arreglan zapatos, los hay que tienen una farmacia ambulante, otros arreglan perolas, otros lavan los coches y las motos dejándolos impecables, también hay algunos que hacen y venden bloques de cemento, muchos son los que tienen puestos para recargar el teléfono, otros ofrecen lujosas camas y colchones, hay lugares en donde se venden plantas y flores, muchos son los que venden ropa por lo general de segunda mano pero a precios muy asequibles… Como veis es la creatividad o mejor dicho todo es bueno para ganarse la vida, de hecho aquí dicen que “trabajar no es robar” y a causa de la situación económica y laboral la mayoría viven de estos trabajos informales y sobre todo de la venta de cualquier cosa.
Para que veáis hasta donde se llega os pongo un ejemplo que he vivido hace unos días. Hemos comprado un par de cerdos para aprovechar los restos de comida que se generan en la comunidad y con un amigo que cría cerdos fuimos para que me ensenara como alimentarlos. La base de la comida se hace con los restos de la cerveza, por lo general maíz o cebada, que las fabricas cerveceras venden y que otras personas revenden. Pero luego fuimos al mercado para comprar lo que él llama “alimento concentrado que luego se mezcla un poco con los restos de cerveza. Para ello primero fuimos al mercado a un puesto de pescado seco y allí compramos un par de cubos de esqueletos y cabezas secas de estos peces, yo me quedé sorprendido pues nada se tira y todo se aprovecha, luego un cubo de soja, y de maíz y todo fue molido allí mismo y se convirtió en este concentrado alimenticio.
 Unos luchan para sobrevivir y aprovechan o reciclan todo mientras que en otros lugares se tira sin criterio pero con la conciencia de reciclar…

Sábado 13 Abril 2013
 Matrimonios que hacen ruido
 Esta mañana a media mañana me parecía de estar en las fiestas de mi pueblo al oír una charanga de música que tocaba y animaba el barrio. Al principio no sabía de que se trataba pero al poco rato me he dado cuenta que no iba a haber vaquillas, ni nada de eso sino que lo que se celebraba era una boda.
Por aquí son muchos los que viven juntos en pareja desde hace años, algunos con bastantes hijos pero que te dicen que no están casados ni por lo civil ni por la iglesia. El matrimonio civil se suele hacer después de haber arreglado el matrimonio tradicional, es decir de haber dado la dote a la familia de la novia. No es algo simbólico, como debería ser, ni mucho menos. Son varias cabras, varios cerdos, cajas de vino, telas y dinero que sin duda sobrepasan los 2000 y 3000 E. una cantidad grande y no al alcance de todos, ni mucho menos.
Además en el matrimonio civil el hombre puede elegir sea el régimen monogàmico o el poligàmico que le permite casarse con otras mujeres y reconocer estos matrimonios a nivel legal. Lo único que este segundo les impide de poderse casar por la iglesia al decir abiertamente que quieren tener varias mujeres. Ya veis que las cosas son complicadas y por eso para llegar a la iglesia, a celebrar el matrimonio, se ha recorrido un proceso largo en el tiempo y desgraciadamente costoso. Sin duda que podría hacerse de un modo sencillo y sin mucha pompa ni ruido pero me da la impresión que es el mismo problema que en España, los que dicen “yo no voy a ser menos”.
Hoy se casaba Martin, un chaval que era monaguillo cuando yo estaba aquí estudiando, y Laure. Y es a causa de ellos que la banda tocaba y animaba acompañando a los novios y después de la boda celebrando y festejando lo ocurrido. Viniendo de Chad en donde todo es más sencillo me ha sorprendido al ver la cantidad de tonterías que aquí se hacen y que es en cierta medida una copia de lo que se hace en Europa: flores en la iglesia, trajes no solo de los novios sino uniformes para la mayoría de los invitados, fotos, videos, luego han anunciado un vino de honor no sé donde, la comida en un sitio y la cena en su casa, aunque yo no he ido a ningún lugar. Pienso que les gusta imitar pero está claro que una boda así está al alcance de pocas parejas pues se necesita mucho dinero para organizar todo.
Sin duda que estoy en este tiempo de ver, abrir los ojos y dejarme sorprender, pero hay cosas que me parece que se podrían hacer de otro modo más sencillo y que permitirían a muchos más de celebrar su matrimonio en la iglesia que tanto lo desean, aunque fuera haciendo menos ruido y sin charanga.

 Lunes 22 Abril 2013
Fin de semana distinto.
 El viernes fui a Duala, llamada capital económica de Camerún, a 230 km de aquí porque me habían invitado a animar una reunión de un grupo de laicos comprometidos con la misión el domingo. La carretera con muchas curvas pero buena, aunque es raro el no encontrar percances en el camino. Ese día encontramos tres accidentes de camiones muy aparatosos y sin duda que con muertos, y estuvimos detenidos en el autobús una hora más o menos.
Allí tenemos dos comunidades, una que se dedica a la animación misionera y que suele acoger grupos y actividades en la casa casi cada semana, y otra que se ocupa de una parroquia enorme en una de las periferias más pobres de la ciudad. El sábado tuve suerte de conocer esta inmensa parroquia en un barrio que ocupa una inmensa zona encharcada. Visitando el barrio y las distintas capillas que los compañeros atienden me preguntaba cómo es posible que la gente hoy en día viva en esas condiciones casi de miseria. Caminos encharcados que uno no sabe por dónde andar, casas hechas con tablones como Dios da a entender, la mayoría de las casas sin agua corriente, sin desagües, ni zonas de recreo, solo casas amontonadas las unas junto a las otras. Son barrios que surgen de día en día, de gente que viene en su mayoría de los pueblos, pero que yo me pregunto que buscan aquí y porque no se han quedado en sus pueblos cultivando pues me parece que es difícil vivir peor que aquí. La mayoría sobreviven con pequeños trabajillos, vendiendo cualquier cosa. De verdad que hay que quitarse el sombrero ante los compañeros que allí viven y trabajan con ilusión y con tanto trabajo.
El domingo tenía que animar la reunión con el grupo llamado Gamix: Grupo de los Amigos de los Javerianos, me habían pedido hablarles de la vocación misionera y luego de celebrar con ellos la eucaristía. Había unas 40 personas y de verdad que me quedé sorprendido de ver el compromiso de esta gente. Debido al contacto con los javerianos desde hace muchos años han querido hacer un grupo de laicos comprometidos con la misión y que llevan el espíritu misionero en los distintos lugares en donde están presentes. Además el año pasado colaboraron con la biblioteca que construimos en Chad con una ayuda de 1070 E para comprar libros. Este año quieren apoyar un poco nuestra casa de teología de Yaundé ya que los gastos con 19 jóvenes en formación son muchos. Con ellos pasé una mañana muy bonita que concluyo con un pequeño compartir de la comida que ellos habían traído. Por primera vez en mi vida comí un bocadillo de espaguetis, pero me supieron a gloria, quizás por el hambre que llevamos encima. El regreso a casa fue en un coche particular de un desconocido que cogí en un cruce allí cerca. Es otro método de viajar, te pones en el cruce y esperas a que alguien se pare y te lleve a Yaundé, hay que pagar el precio del autobús pero es muy rápido, y de hecho el coche era viejo pero el chofer conducía muy bien y rápido y en solo tres horas estábamos aquí. Con lo que tuve la suerte de poder participar al final de la fiesta de nuestra parroquia que se llama “Jesús el buen pastor”. Hubo muchas actividades durante todo el día, hasta vino el nuncio que presidio la misa, pero yo llegué justo a la cena comunitaria con la que se acababa el día. Cada comunidad eclesial de base y cada grupo había preparado algún plato y todo se puso en común en una mesa muy grande. Fue un momento muy bonito, por el hecho de comer juntos y de compartir lo que cada grupo y comunidad había traído. Ya veis que este fin de semana ha dado para mucho y deja un sabor de boca muy bueno. Son signos que las comunidades son maduras y responsables. Un ejemplo bonito de todo el trabajo que durante años se ha hecho gracias al esfuerzo de muchos compañeros. 
Aquí os dejo una presentación con fotos de lo que os he estado contado.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Quizá también te interese:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...