Sábado
6 de enero 202420 misioneros asesinados durante
el 2023
Un año más, los datos publicados por la
Agencia Fides del Vaticano, presentan fotografías de vidas ordinarias truncadas
en el cotidiano testimonio evangélico de pastores, catequistas, agentes
sanitarios, animadores de la liturgia, de la caridad. La lista incluye 1
obispo, 8 sacerdotes, 2 religiosos no sacerdotes, 1 seminarista, 1 novicio y 7
laicos.
2
misioneros más asesinados en comparación con 2022
El número
más alto se registra de nuevo en África, donde han sido asesinados 9 (5
sacerdotes, 2 religiosos, 1 seminarista, 1 novicio). Le siguen América, con 6
víctimas (1 obispo, 3 sacerdotes, 2 laicas), Asia, con 4 laicos asesinados, y
Europa, con un misionero laico asesinado.
Todos han muerto por causas ajenas a su
voluntad: víctimas de secuestros o actos de terrorismo, implicados en tiroteos
o actos de violencia de diversa índole. Desde sacerdotes que se dirigían a
celebrar misa y realizar actividades pastorales en alguna comunidad lejana,
como el padre Jacques Yaro Zerbo, asesinado por pistoleros no identificados en
la región de Boucle du Mouhoun, en Burkina Faso; hasta asaltos a mano armada
perpetrados en carreteras muy transitadas o asaltos a conventos donde los
misioneros se dedicaban a la evangelización, la caridad y la promoción humana.
Es lo que le ocurrió al padre Stephen Gutgsell, asesinado a tiros en la iglesia
de Fort Cahloun, en Nebraska (Estados Unidos).
De México
llega el testimonio de las jóvenes catequistas Gertrudis Cruz de Jesús y
Gliserina Cruz Merino, asesinadas en el Estado de Oaxaca durante una emboscada
cuando se dirigían a una procesión. De Palestina llegó el de Samar Kamal Anton,
y su madre, Nahida Khalil Anton, tiroteadas por francotiradores cuando se
dirigían al convento de monjas de la Madre Teresa en Gaza. Junto con otras
mujeres católicas y ortodoxas, estaban comprometidas en un camino de fe y
apostolado, especialmente en favor de los pobres y los discapacitados. El
dossier de Fides abarca también Europa, donde en España Diego Valencia, laico,
sacristán de la parroquia de Nuestra Señora de La Palma, en Algeciras,
provincia de Cádiz, fue asesinado por un joven marroquí armado con un machete,
que hirió a otras personas además de a él.
Se trata de mujeres y hombres de fe que
podrían haber evitado la muerte trasladándose a lugares más seguros o
desistiendo de sus compromisos cristianos. Eligieron de otro modo a sabiendas
del riesgo que corrían cada día. Ingenuos a los ojos del mundo, pero auténticos
testigos de fraternidad y esperanza gracias a los cuales la Iglesia y el mundo
avanzan.
Concretamente
en 2023 en África los misioneros asesinados fueron en Nigeria (4), Burkina Faso
(2) y Tanzania; en América: en México (4) y EE.UU. (2); en Asia: en Filipinas
(2) y Palestina (2); en Europa: en España (1).
No hay comentarios:
Publicar un comentario