Domingo 2 de Junio 2024Corpus
Christi: pan que se parte y se reparte
Cada año en la fiesta del Corpus Christi que hoy celebramos,
damos gracias por el cuerpo de Jesús que recibimos cada vez que participamos en
la eucaristía. Este pan de vida que nos llena de vida y de fuerza nos invita también
a mirar a nuestro alrededor para que a nadie le falte el pan cotidiano; para
que el pan se reparta y no se tire al quedarse duro. Es por eso que hoy en
todas nuestras celebraciones recordamos que como Jesús se parte y se reparte a
través de la eucaristía, también el pan debe partirse y repartirse entre todos
los hombres. Hoy unimos nuestras fuerzas para colaborar con Caritas que es la
mano de la iglesia cercana a los pobres y necesitados.
Y
precisamente leía estos días una noticia que me ha dejado bastante sorprendido:
“el hambre en el mundo: una situación cada vez más grave”.
La
noticia hacía referencia al informe anual de la Red Mundial contra
las Crisis Alimentarias y afirmaba que en 2023, a nivel mundial más
de 281 millones de personas en 59 países padecían inseguridad alimentaria
aguda: 24 millones más que los 258 millones de 2022. Este aumento parece
que se debe a un fuerte deterioro de la seguridad alimentaria, especialmente en
la Franja de Gaza y en Sudán.
Desgraciadamente
son los niños y las mujeres los que más sufren de estas crisis de hambre. Hay
un buen número de países que llevan muchos años en esta triste lista de los países
más hambrientos del mundo, es el caso de Sudán del Sur, Burkina Faso, Somalia y
Malí. Y a ellos se ha unido la Franja de Gaza debido a la situación actual que
allí están viviendo.
Los
conflictos armados siguen siendo el principal factor que hace que millones de personas
vivan en situación de inseguridad alimentaria aguda. No hay que olvidar los fenómenos
meteorológicos extremos en donde las graves inundaciones,
tormentas, sequías, incendios forestales y brotes de plagas y enfermedades sean
también causa de hambre y mortandad.
El camino
para acabar con esta situación pasa por la paz, por una seguridad alimentaria bien organizada por los estados y las comunidades
locales, y también por gestos concretos de consumo responsable por parte de
cada uno de nosotros. Mahamat Ghandi decía que
“en la tierra hay
bienes suficientes para satisfacer las necesidades de todos pero no la codicia
de algunos”.
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